En la previa del clásico ante Independiente, los integrantes del plantel Sub-17 -que se coronó campeón en el Mundial de Clubes en Madrid- dieron la vuelta olímpica y recibieron la merecida ovación de un estadio Monumental repleto.
Hace solamente siete días atrás, la Sexta de River era el único motivo de alegría en un fin de semana donde las cosas desde lo futbolístico no habían salido del todo bien. Los chicos, que ya habían superado al Barcelona en las semifinales, derrotaban al Atlético Madrid y se coronaban campeones del Mundial de Clubes Sub-17.
Esta tarde en el Monumental, en la previa del clásico entre River e Independiente, los dirigidos por Daniel Messina fueron anunciados por la voz del estadio e ingresaron por la pista de atletismo para dar la merecida vuelta olímpica.
El estadio colmado en su totalidad aplaudió a los chicos, que exhibieron no sólo la copa conseguida en el certamen, sino también los tres premios individuales: valla menos vencida (Augusto Batalla), goleador (Sebastián Driussi) y figura del partido final (Tomás Andrade).
Además del afecto que recibieron del público millonario, David Trezeguet y Tomás Martínez se acercaron para saludar a los chicos y tomar unas fotografías de un momento que, seguramente, quedará en las retinas como uno de los recuerdos más importantes de sus vidas.
Por Ubaldo Kunz /@Sepu79
