En el empate 1-1 frente a Ecuador, que cerró la participación de Argentina en Eliminatorias, Julián Álvarez abrió el marcador en un difícil encuentro en su primera vez como titular.
No la pasaba para nada bien, sufría dolores de cabeza con la velocidad de los delanteros ecuatorianos, pero la Selección Argentina tenía un as bajo la manga: Julián Álvarez hizo gala de su sentido arácnido y picó bien fuerte a los 24 minutos de la etapa inicial. La comenzaron Rodrigo De Paul y Lionel Messi, una pícara sociedad más que probada de cara a Qatar, y entre Alexis Mac Allister y Nicolás González hicieron el resto para que la Araña, tan intrépida como efectiva, lograra inflar la red con un remate cruzado.
A partir de allí, el dominio no fue total pero sí Albiceleste, a pesar de que la posesión estaba repartida. Con menos participación que en el inicio, Julián se ubicó tácticamente por derecha con tal de presionar y aprovechar un inminente envío largo a espaldas de la defensa Tricolor. Lejos quedó la efervescencia en el complemento, dado que comenzaron los duelos verbales, esos que dejan a un lado la pelota y el espectáculo se vuelve monótono.
Con 23 toques, dos remates de los cuales uno fue al arco y terminó en el bautismo de gol, 8 sobre 11 pases completados (73%) y dos pelotas perdidas en medio de la barbarie, el artillero de River -y que Pep Guardiola relojea con ansiedad- cumplió con creces durante los 71′ que estuvo en cancha hasta que Ángel Correa ingresó en su reemplazo. Que presten atención Manchester City y Qatar, porque la Araña está que pica.
La araña que pica, también en Ecuador 🕷💥pic.twitter.com/eIqKsCcEAP
— River Plate (@RiverPlate) March 30, 2022
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