Isotipo_Figuras3

copa libertadores

Basta viejo. No se aguanta más. Que se juegue este partido ante San José de Oruro y que pase lo que tenga que pasar. No me quiero ilusionar, no me quiero esperanzar y tampoco quiero sufrir o padecer. Esto ya es demasiado. ¿Qué te hicimos? ¿Tan mal te tratamos? Creo que no pero vos tendrás tus razones. Y mirá que logramos que te besen dos de los mejores jugadores que te pudieran haber besado en tu vida. Sí, el Beto en el 86 y el Enzo en el 96. ¿Qué más querés? Dos de los mejores jugadores de Sudamérica, y hasta del mundo entero, que el fútbol ha dado, te diría. Te dejamos abrazar por ellos. Pero ya pasó bastante tiempo y de vos ni noticias. Y eso que te fuimos a buscar eh, no nos quedamos de brazos cruzados esperando que vos vinieras. Y nos hiciste sufrir como perros tantos años. Nos diste vuelta la cara, nos dejaste plantados a la vuelta de la esquina. ¿Cuánto más tendremos que esperar para que te dignes a venir al Monumental? Ahora tenemos un museo de lujo. ¡Qué bien que estarías ahí como lucen esas dos réplicas de cuando te pegaste una vuelta por estos pagos en aquellos dorados 86 y 96! Pero vos seguís empecinada en darnos vuelta la cara, en hacer pasarnos papelones. No va más así. Ya sé. Reconozco que cometimos errores. Y muchos. Pero nosotros, a pesar de todo, te queremos igual y soñamos con vos.

De todas maneras, esto ya es demasiado. No nos podés hacer sufrir tanto, tené un poco más de respeto por nosotros. Qué se yo, es lo que sentimos. Por ahí pecamos de vanidosos, pero te vamos a decir algo que, creo, no te va a gustar y te vas a ofender. No nos importa. Total, ya estamos jugados. Mirá querida, River es tan grande, tan pero tan inmenso que no merecemos tus malditos desplantes. Así que si no querés venir, no vengas. Seguirás prostituyéndote por ahí o estarás paseando por cualquier lugar. No importa. No merecemos sufrir por vos. Así que basta viejo, basta. Basta de hacernos sufrir. Bastaaa!!!! No queremos tu amor si no estás dispuesta a abrirnos tu corazón.

Eso sí, fíjate, mirá, prestale atención esta noche a todos esas almas que van a estar suspirando, latiendo, sufriendo por vos en ese hermoso estadio que tiene ganas de cobijarte. Fijate. Si te arrepentís, podemos llegar a charlarlo. Y empezar, de ahora en más, a tratarnos mejor…

De un corazón riverplatense a la Copa Libertadores.