(INCLUYE VIDEO) En diálogo con LA MÁQUINA, Santiago Lencina, autor del empate agónico de la Novena División ante Estudiantes de La Plata, relató cómo vive la transición desde el fútbol infantil al juvenil y explicó por dónde pasan las diferencias. Además, contó cómo fue su llegada al club proveniente de Chaco y qué significa vivir en la pensión de River.
La Novena División millonaria cerró la jornada ante el Pincha con una igualdad agónica, gracias al tanto de Santiago Lencina a pocos segundos del pitazo final.
Tras el partido, el enganche chaqueño dialogo mano a mano con LA MÁQUINA y explicó las razones del empate: «Creo que fue un partido muy difícil. Ellos juegan bien. Gracias a Dios pudimos empatar. En el primer tiempo jugamos mal. En el segundo nos dijo el técnico que teníamos que salir a atacar. Hicimos eso y lo empatamos», manifestó el juvenil del Más Grande.
Consultado por la transición desde el fútbol infantil, Lencina afirmó: «Es un cambio muy difícil porque los chicos se ponen cada día más grande y que los equipos, hasta los más chicos, te hacen partido», indico.
Por su parte, contó cómo se produjo su llegada al club: «Es una experiencia muy linda. Soy de Chaco, tengo la suerte de estar acá. Fui a un torneo de Misiones, ahí me vieron y me dijeron que me fuera a probar. Quedé y me dijeron que me venga a vivir a la pensión», recordó.
¿Cómo es vivir en «La Casita Juvenil», a metros del Monumental y tan lejos de Chaco? «Extrañás un poco a tu familia pero es lindo porque estás con tu segunda familia. Con los chicos tratamos de apoyarnos entre todos así no extrañamos tanto», reveló el mediocampista de la 2005.
Para finalizar y para que de a poco lo vayan conociendo, se refirió a sus características como futbolista y se definió como un jugador que le gusta «encarar, dar pases filtrados y pegarle bien a la pelota», concluyó.
Nota: Andy Gómez / Cámara: Maru Campo
