El «Diablito» Echeverri marcó su primer gol en River y lo gritó con emocionado entre lágrimas.
Cuando River perdía 1-0, en un partido complejo sin espacios y lugar para asociarse en ofensiva, Claudio Echeverri se inventó un verdadero golazo para empatar el encuentro y desatar toda la emoción del Monumental. Pero por sobre todas las emociones, estuvo la del enganche de 18 años, que se besó el escudo y lo gritó con la gente con sus ojos conmovidos por el primer gol con camiseta del Más Grande.
Ya había dejado buenas sensaciones en la final de la Supercopa contra Estudiantes, cuando entrando en el segundo tiempo fue pieza clave para la remontada del Millonario, pero todavía no podía llegar su estrenó en las redes. Llegó en un momento ideal tanto para él como el equipo.
Consiente de las críticas que recibió el año pasado con su desacertada frase: «No voy a renovar, jugaré un año en River y después me voy». Hoy volvió a hablar con los medios y corrigió sus palabras: «En ningún momento me iba a ir libre, yo amo a este club. Me expresé muy mal». Declaró el chaqueño. Y sobre el sueño del mundo River, remarcó: «El objetivo que tenemos es la Copa».
